El libre pensador Hakermann Luis Salcedo Mata, nos presenta otra de sus inquietudes poéticas
 18 diciembre, 2021
Miami, 18 dic (OPI).- El libre pensador Hakermann Luis Salcedo Mata, nos presenta otra de sus inquietudes poéticas y las comparte en un mundo cada vez, más necesitado de todos.
Encierros En Circunstancias
Uno se mete en muros de aislamiento, esos muros cada vez más cerca esperan a que te debilites, que te quiebres, están esperando que pierdas las Esperanzas para darse un festín.
Esos muros se arrastran y quedan tan cerca de ti esperando ese único momento de debilidad mental para encimarse es la realidad.
Puede ser que no lo comprendas que no entiendas, ellos (los muros) están allí esperando, te gritan, te atacan te culpan, en cuanto noten que estás desesperado, que estás angustiado, que no tienes fe, te atraparán en el peor sentido.
Si pierdes la concentración o te debilitas espiritualmente, estás paredes se darán un banquete e intentarán apagar tu alma.
En los encierros durante la vida se puede deducir que la única forma de entender al otro es estar en su lugar, no siempre tenemos la oportunidad de elegir más todo forma parte de todo y luchamos por un derecho vital de ser útil, pudiera ser este segundo el final de tu vida o el comienzo de la misma.
En momentos esas paredes parece que te seccionarán la carne pedazo a pedazo y cuando ya van a terminar contigo que te rindes y dices: “ basta ya no puedo más”, los mismos muros se retienen vigilantes y se aseguran de guardarte apenas vivo para acabar contigo de la misma manera en el siguiente segmento del próximo día.
Uno quiere arreglarse la vida aunque sea para sus hijos, ellos no ven tus muros o por lo menos por ahora no los pueden ver, depende de lo que puedas hacer a partir de hoy.
El transcurrir de la vida me enseña que la acción y la esperanza es la mejor vía para enfrentar y derrotar la adversidad por muy invencible que se presente, afortunadamente, la Fe es esencial cuando se desea contar con el apoyo divino para salir victorioso en cualquier circunstancia de nuestra existencia, y pues estoy seguro que podemos dejar atrás todo encierro Infecundo.

Hay gente que duerme en el piso y tiene esperanzas, hay gente que no tiene que comer y tiene esperanzas, hay gente con enfermedad terminal y tiene esperanza, entonces aun estando dentro de las circunstancias que sean, podemos trabajar en mantener viva esa esperanza que detienen a los muros de nuestros encierros.
Mi Hija se Llama Esperanza.
Avancemos.