Bruselas, 15 dic (EFE).- La Comisión Europea (CE) desveló este martes un paquete de medidas para acelerar el desarrollo de un sistema de transportes sostenible y digital, entre ellas una hoja de ruta con iniciativas para impulsar los trenes de pasajeros de alta velocidad en toda la Unión Europea (UE).

Bruselas quiere conseguir que los desplazamientos entre socios del bloque en tren sean «más atractivos» gracias a viajes «más cortos, más frecuentes y más asequibles» porque sólo el 7 % de los kilómetros recorridos por trenes europeos entre 2001 y 2018 involucraron al menos a dos Estados miembros.

Para lograrlo, muchas de las acciones incluidas en el plan de acción están dirigidas a abaratar la compra de billetes, por ejemplo, facilitando la venta de tickets válidos para varios medios de transporte o con una posible exención en el pago del IVA en el caso de viajes internacionales.

«Los billetes de tren tienen que ser más fáciles de encontrar, de reservar y de comprar a precios atractivos», resumió el vicepresidente del Ejecutivo comunitario responsable del Pacto Verde Europeo, Frans Timmermans.

Además de facilitar el acceso a billetes de tren, el plan de acción prevé la «derogación» de normas técnicas y operativas nacionales que son «redundantes» y unas directrices para simplificar el acceso de operadores ferroviarios a infraestructuras, lo que supondrá una mayor competencia entre compañías del sector.

ACELERAR LA RED EUROPEA DE TRANSPORTES

La hoja de ruta incluye también la nueva revisión del reglamento sobre la red transeuropea de transportes (TEN-T), con la que el Ejecutivo comunitario busca actualizar la normativa actual que data de 2013 y generalizar así los desplazamientos en tren de alta velocidad en el bloque.

En esta revisión es que Bruselas propone establecer una nueva meta intermedia para la red con el objetivo de que en 2040 estén completadas ya las principales «arterias» de la misma, diez años antes que la fecha límite fijada para el conjunto del sistema.

El plan de Bruselas ya pasaba por lograr que al finalizar esta década esté finalizada la red básica de los corredores de transporte y ahora sugiere que diez años después se haya completado la «red básica ampliada» con nuevos «estándares» como una velocidad mínima en las líneas de 160 kilómetros por hora.

«Una novedad es que habrá una meta intermedia para completar secciones clave que no pueden esperar hasta 2050, tendremos el concepto nuevo de red básica ampliada con fecha límite en 2040», explicó la comisaria de Transportes, Adina Valean.

A todo esto se suma otra propuesta para reformar la directiva sobre sistemas inteligentes de transporte para conductores a fin de adaptar las normas a las nuevas opciones de movilidad y de «estimular el despliegue rápido de nuevos servicios inteligentes» haciendo que algunos datos «cruciales» -como límites de velocidad, obras o planes de circulación- estén disponibles en formato digital.

MOVILIDAD URBANA

El último elemento del paquete de medidas que ha presentado la Comisión Europea son una serie de directrices para las mayores ciudades de la UE diseñen planes de movilidad urbana que fomenten los desplazamientos en bicicleta y transporte público.

La intención de estas recomendaciones es que las ciudades adapten sus medios de transporte a las necesidades climáticas y contribuyan también al bienestar general de la ciudadanía.

Las recomendaciones buscan en particular adaptar el transporte en las ciudades a las necesidades climáticas, pero también contribuir al bienestar general de la ciudadanía gracias a una reducción los accidentes de tráfico, mejoras en la calidad del aire o el fomento del ejercicio físico, como el ciclismo.

«No hay una sola ciudad en Europa que no tenga la ambición de ir en esa dirección», dijo Timmermans, quien agregó que el objetivo de la Comisión es fomentar entre ayuntamientos el diálogo y compartir buenas prácticas que aceleren la descarbonización. EFE.