Madrid, 6 oct (EFE).- Con motivo del Día Mundial de los Docentes, este martes, CCOO ha acusado al Gobierno de la presidenta Isabel Díaz Ayuso de «devaluar la labor del profesorado» madrileño, cuyas retribuciones son hasta 729 euros menores cada mes que en otras regiones, pese a tener más horas lectivas y mayores ratios de alumnos por aula.

En este Día Mundial, que se celebra bajo el lema «Las y los docentes siempre presentes», CCOO insta a las administraciones a «asegurar una enseñanza pública con un profesorado bien formado, con condiciones laborales dignas y el reconocimiento social que se merecen».

El éxito del curso pasado «no habría sido posible sin la labor del profesorado, en medio de una coyuntura nueva y especialmente difícil debido a la pandemia», que se alargó durante todo un curso, y cuyas dificultades los docentes tuvieron que «sortear sin contar con el apoyo necesario de las administraciones educativas», indica el sindicato en un comunicado.

El profesorado «sacó adelante el curso pasado, garantizando el funcionamiento de los centros y el derecho a la educación», y sigue haciéndolo este curso «con unas ratios más altas y una reducción de las plantillas docentes», consecuencia directa de las acciones de la Consejería de Educación y su «continuada falta de respeto a la profesión docente y a la educación pública».

A las dificultades de la pandemia, de la tormenta Filomena o del teletrabajo, hay que sumar «las políticas de austeridad implementadas en la Comunidad de Madrid en las últimas décadas, así como los duros recortes sufridos» durante años que aún no se han revertido.

Uno de los más graves es «la distancia retributiva» del profesorado madrileño con los de otras comunidades. En Madrid, que es la comunidad con el PIB más alto, el profesorado encabeza el ranking de horas lectivas y también el de ratios».

En el caso de los maestros, Madrid es la tercera por la cola, con una «retribución bruta mensual hasta 729 euros menor que en otras comunidades. Lo mismo sucede en el caso de los profesores técnicos de Formación Profesional, que en Madrid son los terceros más bajos del país».

El salario, además de determinar las condiciones de vida de los docentes, «representa el valor social que una comunidad da a la tarea educativa, y el caso de Madrid es un ejemplo perfecto de cómo devaluar la profesión docente», añade.

También hay «mucho que avanzar en el reconocimiento de la función tutorial y de todas las demás tareas» realizadas por el profesorado más allá de la docencia directa.

Hay que acabar con «la alta temporalidad, que afecta a casi un tercio del profesorado. Durante el curso 2020-2021, las cifras de temporalidad llegaron al 27,7 por ciento».

Comisiones Obreras también exige aumentar la plantilla, que al inicio de este curso se ha reducido en más de 6.000 docentes.

El reconocimiento y la dignificación de la profesión docente pasa por «políticas de apoyo al profesorado y su labor», como bajada de ratios y del horario lectivo, reconocimiento de la función tutorial, inversión en plantilla, homologación retributiva y desarrollo profesional.

«El mejor homenaje y reconocimiento que se puede hacer al profesorado es mejorar sus condiciones laborales y retributivas», concluye el sindicato. EFE.