Marbella, 8 ago (EFE).- Cortes, golpes o traumatismos accidentales son, junto a la artrosis, los principales motivos de atención en la unidad de cirugía de la mano, según el director médico-quirúrgico del hospital Costa del Sol de Marbella (Málaga) y presidente de la Sociedad Española de Cirugía de la Mano (Secma), Adolfo Galán.

En enclaves turísticos se ven «muchos cortes causados por botellas y vasos» y es «bastante frecuente atender traumatismos directos», sobre todo, en camareros y profesionales de la hostelería, ha explicado a Efe el presidente de Secma.

Además de los traumas, «cualquier persona que utilice las manos en su trabajo o que realice movimientos repetidos con ellas puede desarrollar patologías asociadas a esos movimientos», como «dedos resorte», ha asegurado.

A quienes padecen esta enfermedad «el tendón flexor se les atasca», explica Galán, «se engruesa y crea un problema mecánico», tipo «cuerda de arco», que hace que el dedo se quede agarrotado y al desbloquearse pueda saltar como un resorte, de ahí su nombre.

Hay «niños pequeñitos que tienen cierta predisposición» a ella y que su tratamiento requiere cirugía; y adultos que lo sufren como consecuencia de «presiones repetidas en la zona de agarre de la palma de la mano».

DEDO RESORTE, DOLENCIA DE CONDUCTORES

Acciones como coger el manillar de una bicicleta o el volante de un automóvil durante horas pueden provocar la inflamación de los mecanismos que facilitan la movilidad de la extremidad, por lo que repartidores, taxistas o camioneros son muy proclives a desarrollarla, afirma este especialista.

Otra dolencia de la mano es la artrosis, agravada por la presencia de movimientos que conllevan pequeños y constantes traumatismos; y entre sus variantes más habituales, la rizartrosis, también conocida como artrosis del pulgar.

Esta afección, que se caracteriza por una inflamación en la base del pulgar entre el hueso trapecio y el primer metacarpiano, «es muy frecuente entre quienes se dedican a la limpieza» por la forma de coger la fregona o escurrir bayetas, abunda Galán.

La rizartrosis afecta también a los mecánicos de coches, añade el director médico-quirúrgico del Costa del Sol, ya que tienen que atornillar y desatornillar cientos de piezas mediante «movimientos de pinza».

ARTROSIS DEL PULGAR, UN MAL ENDÉMICO

Este tipo de artrosis es, a juicio del presidente de Secma, «un mal endémico general de toda la población», ya que está vinculada a acciones frecuentes como escribir o coger objetos en las que interviene el pulgar.

El uso diario de mandos a distancia y de controles de consolas de videojuego favorece, al igual que cualquier otro movimiento repetido y continuado en el tiempo, la aparición de «dedos resorte» y «rizartrosis».

Si bien no se puede asociar el desarrollo de este tipo de enfermedades a un único factor, «es cierto» -y así lo muestran las impresiones clínicas- que cada día se ven «patologías artrósicas en la base del pulgar en personas más jóvenes», confirma Galán.

«HAY QUE CUIDARLAS»

«Las manos, cuyo uso diferencia al hombre de los animales, hay que cuidarlas porque tienen que durar mucho tiempo» y son una pieza «fundamental» para mantener la independencia y la calidad de vida», subraya el presidente de Secma.

Aunque no hay cultura sobre su cuidado, es necesario «protegerlas porque están muy expuestas», hacer ejercicio para mantenerlas fuertes o usar guantes con almohadillas al conducir o fregar, ya que muchas de estas patologías se podrían prevenir, insiste Galán.

En cuanto a su posición al frente de Secma, Galán ha indicado que apuesta por la investigación y la formación para mantener el «reconocimiento internacional» con el que cuentan a día de hoy los especialistas en cirugía de la mano españoles.

Esther Gómez

(c) Agencia EFE